Repaso 2° Parcial de Literatura de 4° año

Romanticismo esquema

 Gustavo Adolfo Bécquer: Los ojos verdes (leyenda)

Antonio Machado: «Proverbios y cantares»

Federico García Lorca: «Romance de la casada infiel»

El hombre que tenía tres. Escena 3.

El hombre que tenía tres

Gabriel Grau. 2010

ESCENA 3

Carmen y Néstor en charla animosa. Pueden estar ubicados fuera del escenario, caminando
entre el público.
Carmen: ¿Cambiar al mundo?… no, Néstor. Ya pasé por eso y te lo dejo para vos. Creo que no es una cuestión de ideales sino de edades. Es una enfermedad contagiosa de todo estudiante universitario novato… ¡después se cura! Yo también la pasé ¡ojo!…corriendo con la milicada atrás. Y eso que, cómo decirlo, eran otras épocas y había otra mística… (Pausa)
Néstor: (Pensativo) No sé… yo acepto que la gente cambie. Cambian los tiempos, la tecnología,la aceleración, la aldea global… pero pará. Hay asuntos que son los de siempre!
Carmen: Ya no estoy tan segura. (Pausa) Hay una pérdida de brújula, de sentido de la vida, el posmodernismo, ¡qué se yo! La gente vive tensa. Lo ves en la calle, en el laburo, en la familia.
Con un apuro para llegar a ningún lado…
Néstor: ¡Mayor razón para el compromiso! Tecnología, mercado, consumo, ¡mierda! ¡Morfamos mierda! ¡Por la boca y por el bocho! Y todavía creemos que tenemos el dominio de la naturaleza
¡Que dominio ni que ocho cuartos, si estamos inundando el planeta de caca!
Carmen: Y bueno, vendrán cincuenta generaciones para adelante barriendo contaminación bajo la alfombra… pero no seremos nosotros!
Néstor: ¡Investigación espacial! Con tanto negrito muerto de hambre en Africa…
Carmen: Y aquí también! … cuando entré al teatro habían dos gurises pidiendo… y por allí también, ¡claro! alguna cuatro por cuatro en plena crisis del petróleo! ¡Y así vamos! Qué más queda. Jugar la tuya.
Néstor: ¡No me jodas! Si esto parece más bien un suicidio colectivo. (Apagón).

Después de leer la escena responde:

1.¿Qué problemas sociales se plantean en esta escena?
2.¿Qué se dice de la juventud y de la adultez?
3.¿Qué contrastes se establecen?
4.“yo acepto que la gente cambie” ¿En tu experiencia: La gente cambia? Fundamenta.

Lazarillo de Tormes

El Lazarillo de Tormes
La novela picaresca supone el nacimiento de un género novelístico completamente nuevo que tuvo lugar en España en el siglo XVI.

Durante este siglo, las clases populares vivían de un modo extremadamente pobre, como bien se refleja en el libro, ya que había que mantener el Imperio Español. Este Imperio, de enorme extensión, costaba grandes sacrificios a la población, la cual debía sacrificarse rozando la extrema pobreza para poder pagar las necesidades del ejército el cual luchaba por el prestigio del Imperio.

El Lazarillo de Tormes es una novela del tipo picaresca aparecida en el año 1554, con el nombre de “Vida de Lazarillo de Tormes y sus fortunas y adversidades”, en una España sumergida en literatura de caballeros y espadachines románticos. A la obra nunca se le conoció su autor quien posiblemente prefirió permanecer en el anonimato por el tipo de crítica que hacía al clero, y en efecto, esta obra fue prohibida por el estado español y catalogada por la inquisición dentro del Índice del Purgatorio. No fue hasta 1573 cuando se autorizó su publicación con la omisión de los capítulos cuatro y cinco así como algunos párrafos de otros que la santa inquisición decidió censurar.
Esta versión incompleta fue impresa una y otra vez hasta el siglo XIX cuando España por fin permitió a sus habitantes conocer la obra completa. Sobre su autoría se dicen algunos nombres como el monje Juan de Ortega, el escritor dramático Sebastián de Orozco y el humanista Diego Hurtado de Mendoza, aunque seguramente nunca lo sabremos con exactitud.

El libro tiene 7 tratados o capítulos en los que un pícaro, de nombre Lázaro, cuenta las penas de su vida y cómo malvivió con varios amos hasta que se casó.

Puedes leer una versión completa aquí

La novela picaresca

Características de la novela picaresca

Al margen de la individualidad propia de cada obra, todas las novelas picarescas comparten una serie de características comunes que podrían resumirse en las siguientes.
1. El protagonista es el pícaro, de muy bajo rango social y descendiente de padres sin honra o abiertamente marginados o delincuentes. A modo de antihéroe, el pícaro resulta un contrapunto al ideal caballeresco, suele pasar hambre y sobrevive gracias a su ingenio en un mundo hostil y cruel, siempre en soledad.. Su aspiración es mejorar de condición social, pero para ello recurre a su astucia y a procedimientos ilegítimos como el engaño y la estafa. Vive al margen de los códigos de honra propios de las clases altas de la sociedad de su época y su libertad es su gran bien aunque ésta se encuentra condicionada o determinada, por sus coordenadas existenciales.
2. Carácter autobiográfico. La novela picaresca está narrada en primera persona como si el protagonista narrara sus propias aventuras. La forma autobiográfica estará en función de la orientación de crítica social que ejercerá la novela picaresca. El pícaro nos cuenta su paso de la niñez a la madurez, y en todas ellas hay un punto de vista único sobre la realidad: la del pícaro.
3. Una doble temporalidad. El pícaro aparece en la novela como autor y como actor. Como autor, se sitúa en un tiempo presente que mira hacia su pasado y narra una acción, cuyo desenlace conoce de antemano. Y como actor se sitúa en la historia ayudando a desencadenar las acciones.
4. Estructura abierta: aunque el pícaro intenta mejorar de condición social, fracasa siempre y siempre será un pícaro. La estructura de la novela picaresca es siempre abierta. El pluralismo de aventuras que se narran podrían continuarse; no hay nada que lo impida, porque las distintas aventuras no tienen entre sí más trabazón argumental que la que da el protagonista.
5. Carácter moralizante y pesimista. Cada novela picaresca vendría a ser un gran «ejemplo» de conducta aberrante que, sistemáticamente, resulta castigada. La picaresca está muy influida por la retórica de la época, basada en muchos casos, en la predicación de «ejemplos», en los que se narra la conducta descarriada de un individuo que, finalmente, es castigado o se arrepiente.
6. Carácter satírico. La sátira es un elemento constante en el relato picaresco. El protagonista deambulará por las distintas capas sociales, a cuyo servicio se pondrá como criado, lo que le permitirá conocer los acontecimientos más íntimos de sus dueños. Todo ello será narrado por el pícaro con actitud crítica. Sus males son, al mismo tiempo, los males de una sociedad en la que impera la codicia y la avaricia, en perjuicio de los menesterosos que pertenecen a las capas más bajas de la sociedad.
7. Realismo e incluso naturalismo o expresionismo están presentes al describir algunos de los aspectos más desagradables de la realidad, que nunca se presentará como idealizada sino como burla o desengaño.
El autor coloca al pícaro y al mundo que lo rodea dentro de una verosimilitud narrativa, en consonancia con su personalidad y el medio ambiente en el que vive. Esto se consigue intentando que la lengua sea un reflejo de este telón de fondo social; de ahí que abunden los vulgarismos y un estilo coloquial, con el que se intenta un acercamiento a la situación existencial del protagonista y de su medio ambiente.